SEMIRAMIS REINA DE BABIBLONIA Y DIOSA MADRE



SEMIRAMIS DE REINA DE BABIBILONIA A REINA DEL CIELO DIOSA MADRE Y MADRE DE DIOS

 

Cualquier esfuerzo por rastrear los orígenes del mito, la leyenda y la tradición del culto a la diosa eventualmente lo llevará a uno de regreso a una sola figura histórica: Semiramis, esposa de Nimrod y reina de Babilonia, y esto es especialmente cierto cuando se considera a la diosa y al planeta Venus.

 

Sin embargo, antes de que podamos comenzar a tratar con Semiramis, debemos (como con cualquier figura histórica) obtener al menos una comprensión general de su entorno cultural y temporal. Dado que he encontrado en mis investigaciones que ni la verdad científica probada ni los hechos extraídos del cuerpo de leyendas antiguas contradice de ninguna manera una comprensión adecuada de la revelación Escritural del Tanaj, por tanto, usaremos tanto el marco Escritural como el de la historia como base sobre la cual reconstruir la historia de Semiramis la mujer.

 


LEA NUESTRO ANÁLISIS EL CULTO PAGANO DE LA MADRE DE DIOS REINA DEL CIELO



Cuando Noaj/Noe y su familia abandonaron el arca después del diluvio, se establecieron primero en los pies del norte de Ararat frente a lo que hoy es Georgia, URSS. Desde aquí, estas ocho almas comenzaron a extenderse a los distritos circundantes del norte de Irán y Siria, así como al este de Turquía. Después de un período considerable (tal vez entre cinco y seiscientos años), las familias de los descendientes de Noaj comenzaron a dispersarse un poco más debido al aumento de la población y tal vez algún grado de rivalidad o incluso enemistad entre las familias de Jafet, Sem y Cam. De esta manera, encontramos que en aproximadamente medio milenio toda la "media luna fértil", así como el valle del Nilo, las mesetas de Anatolia e Irán, Arabia y Etiopía han sido escasamente pobladas, pero con una mayoría decidida de Noaj.

 

La arqueología moderna ha confirmado que los primeros habitantes de estas áreas eran homogéneos tanto en raza como en cultura, y las investigaciones más confiables indican que fue de aquí que la población, la ganadería, la metalurgia, la agricultura y la "ciudadanía" se extendieron por toda la tierra. Los puntos de vista científicos y bíblicos coinciden exactamente en el origen y la propagación de las razas y la civilización, ¡el único punto de diferencia es la escala de tiempo involucrada! Considerando que las escrituras claramente indican la existencia de todos estos elementos de la civilización mucho antes del diluvio; La ciencia ortodoxa, por su negación de la Biblia, necesita construir una mítica edad de piedra de varios milenios para dar cuenta de los mismos fenómenos.

 

Fue en Mesopotamia donde se construyeron las primeras ciudades después del diluvio, y la primera de ellas recibió el nombre de la primera ciudad construida por el hombre antes del diluvio: Enoc. Debido a los caprichos de la permutación lingüística, este nombre nos ha llegado como Erech o Uruk en Sumeria. En total, se construyeron siete ciudades importantes cerca de la cabecera del Golfo Pérsico, lo que lleva al nombre de "Tierra de las Siete Ciudades" que se encuentra comúnmente en las primeras mitologías del mundo. Estas siete ciudades se enumeran en Génesis como aquellas que fueron conquistadas por Nimrod, estableciendo el primer imperio del mundo. Las primeras leyendas babilónicas hablan de un pueblo conquistador que salió del Golfo Pérsico y estableció un imperio desde estas ciudades. Esto parece encajar bien con lo que sabemos de los movimientos de Nimrod en su carrera temprana. Era un nativo de Etiopía y viajaba mucho entre las pocas áreas pobladas de esos días. Cuando se propuso construir un ejército de conquista, reclutó entre sus "primos" a los descendientes de Saba y Dedán que habían llegado a través de Arabia para establecerse en el continente asiático en el Estrecho de Ormuz y en el río Indo en lo que es ahora Afganistán (estas personas eran los dravidianos que fueron empujados hacia el sur hacia la India por la posterior invasión aria). Después de levantar su ejército, Nimrod los transportó por el golfo en la primera armada naval del mundo y conquistó su imperio. Las mejores estimaciones sitúan la época de la conquista entre el 4000 y el 3500 a.C. y aproximadamente 1000 años después del diluvio de Noaj. reclutó entre sus "primos" a los descendientes de Saba y Dedán que habían llegado a través de Arabia para asentarse en el continente asiático en el Estrecho de Ormuz y en el río Indo en lo que ahora es Afganistán (estas personas eran los dravidianos que fueron conducidos hacia el sur en la India por la posterior invasión aria). Después de levantar su ejército, Nimrod los transportó por el golfo en la primera armada naval del mundo y conquistó su imperio. Las mejores estimaciones sitúan la época de la conquista entre el 4000 y el 3500 a.C. y aproximadamente 1000 años después del diluvio de Noaj. reclutó entre sus "primos" a los descendientes de Saba y Dedán que habían llegado a través de Arabia para asentarse en el continente asiático en el Estrecho de Ormuz y en el río Indo en lo que ahora es Afganistán (estas personas eran los dravidianos que fueron conducidos hacia el sur en la India por la posterior invasión aria). Después de levantar su ejército, Nimrod los transportó por el golfo en la primera armada naval del mundo y conquistó su imperio. Las mejores estimaciones sitúan la época de la conquista entre el 4000 y el 3500 a.C. y aproximadamente 1000 años después del diluvio de Noaj. Después de levantar su ejército, Nimrod los transportó por el golfo en la primera armada naval del mundo y conquistó su imperio. Las mejores estimaciones sitúan la época de la conquista entre el 4000 y el 3500 a.C. y aproximadamente 1000 años después del diluvio de Noaj. Después de levantar su ejército, Nimrod los transportó por el golfo en la primera armada naval del mundo y conquistó su imperio. Las mejores estimaciones sitúan la época de la conquista entre el 4000 y el 3500 a.C. y aproximadamente 1000 años después del diluvio de Noaj.

 

En medio del tumulto de la guerra, Nimrod y Semiramis se conocieron, y en circunstancias no demasiado agradables, ya que la tradición dice que ella era una posada / burdel en la ciudad de Erech, lo que lleva a uno a especular sobre la naturaleza de su conocido. Semiramis era un nativo de Erech, que como lo demuestra su nombre parece haber sido construido por una familia camítica (se decía que la esposa de Cam era descendiente de Caín, quien construyó el primer Erech en honor a su hijo). El nombre Semiramis es una forma helenizada posterior del nombre sumerio "Sammur-amat", o "regalo del mar".

 

El elemento inicial "SAMMUR" cuando se traduce al hebreo se convierte en "SHINAR" (el nombre bíblico para la Mesopotamia inferior), y es la palabra de la que derivamos "SUMERIA" Esta mujer empañada entonces, tuvo un impacto tan duradero en la historia del mundo que no solo llamamos por su nombre a la tierra de donde fluyó la civilización, sino que Dios mismo a través del escritor sagrado nos ha hecho saber que su característica distintiva era que era "LA TIERRA DE SHINAR" o Semiramis. Muy poco nos ha llegado a lo largo de los milenios con respecto al ascenso al poder de Semiramis, pero es seguro asumir que inicialmente fue sobre los faldones de Nimrod que montó, aunque más tarde en la vida, así como a lo largo de la historia, su influencia oscureció abrumadoramente la de ella. marido. Por supuesto,

 

Semiramis fue la instigadora en la formación de la religión falsa destinada a apoyar su gobierno y, por supuesto, su sugerencia cayó en oídos abiertos.

 

La religión que inventó se basó principalmente en una corrupción de la astronomía primitiva formulada por los justos antepasados ​​de Noaj antes del diluvio. En el original, este sistema representaba por medio de constelaciones la historia de la rebelión de Satanás y la guerra en los cielos, su subversión de la humanidad, la caída de Adán y Eva, la promesa de Uno por venir que sufriría y moriría para liberar al hombre de la maldición del pecado será entonces instalada como Señor de la Creación, y la resubyugación final del cosmos a Dios a través de Él.

 

Estas verdades eternas fueron corrompidas por ella (más bien, obviamente, por el maligno que la controla) en un ciclo mítico en el que el gran dragón es representado como el legítimo señor del universo cuyo trono ha sido usurpado temporalmente por Uno a quien podemos reconocer como el Dios de la Biblia. La serpiente crea al hombre en su miserable estado actual, pero promete que un día nacerá un niño de una madre divina, que suplantaría a Dios, se convertiría en un dios y devolvería el gobierno de la Tierra a la serpiente. Estas fábulas se basaron en la entonces ampliamente conocida historia de las constelaciones, y se introdujeron con el pretexto de revelar el conocimiento esotérico oculto oculto en ellas (independientemente del hecho de que el original era bastante sencillo).

 

Aunque este esoterismo era el segundo elemento del culto de Semiramis, solo enmascaraba el objetivo real que era la adoración de la "hueste celestial", que la Biblia equipara con el ejército de ángeles caídos de Satanás. Satanás estaba bastante dispuesto a recibir adoración "por poder", de ahí que el tercer elemento principal de la religión misteriosa fuera la adoración al emperador. Esta religión fue propagada por una jerarquía de sacerdotes y sacerdotisas, a quienes se les asignó la tarea de iniciar a la población en general en sus grados ascendentes de revelación, culminando al más alto nivel tanto en la adoración directa de Satanás como en la posesión demoníaca.

 

Aunque Nimrod fue un brillante estratega, cometió un error fatal cuando permitió que Semiramis mantuviera el control total sobre esta jerarquía religiosa y, a través de ella, las mentes y los corazones de la gente; porque cuando ocurrió un cisma entre ellos, ella pudo convertirlo de una herramienta de apoyo en un arma mortal. La ruptura entre marido y mujer ocurrió cuando la reina dio a luz a un hijo ilegítimo, y el rey la amenazó con destronarla y exponer su verdadero origen. Semiramis, por supuesto, no permitió que esto sucediera, e ideó un complot para derrocar a Nimrod.

 

Durante el transcurso de las festividades de Año Nuevo en las que se celebró el advenimiento del gobierno de Nimrod, hubo una cierta fiesta exclusivamente para la familia real y los escalones superiores del sacerdocio. Durante este festín, que incluía "cursos" de drogas psicodélicas y alucinógenas, tradicionalmente se sacrificaba un carnero de un año al ser desgarrado miembro por miembro mientras aún estaba vivo, y su carne se comía cruda. Este carnero simboliza el paso del año viejo a los cielos para dejar espacio para el año nuevo. Luego se presentó un cordero recién nacido que, simbolizando el año nuevo, sería guardado y engordado para las ceremonias del año siguiente. Este año Semiramis dirigió el ritual según la fórmula, con la excepción de que cuando llegó el momento de sacrificar el carnero, fue el rey quien fue despedazado a manos del sacerdocio enloquecido por las drogas y el hijo bastardo de Semiramis fue instalado como rey. Así, Nimrod, el poderoso cazador, tuvo una muerte horrible como una bestia atrapada.

 

Semiramis nombró a su hijo Damu (del sumerio "presa" o sangre), que en el idioma babilónico posterior se convirtió en Dammuzi, en hebreo Tammuz y en griego Adonis. Por supuesto, Semiramis asumió la regencia de su hijo pequeño y gobernó como monarca absoluta durante 42 años más. Para evitar tener que matar a su hijo el próximo día de Año Nuevo, instituyó una competencia deportiva anual a nivel nacional, cuyo ganador tendría el "honor" de tomar el lugar de Damu y ascender al cielo para convertirse en un dios.

 

Sin embargo, Semiramis no se opuso a su arrogación de la regencia, ni a su gobierno como mujer. El brazo militar del gobierno se dividió en dos bandos a favor y en contra de ella, y se produjo una breve guerra que terminó cuando el pueblo (despertado por el sacerdocio) no solo se negó a apoyar a los "rebeldes" sino que se opuso activamente a ellos. Sin embargo, en el transcurso de esta guerra, las cosas se pusieron tan cerca que Semiramis se vio obligada a construir un sistema de muros, torres y puertas alrededor de Babilonia para defenderse. Por lo tanto, fue la primera en construir fortificaciones y su corona después tomó la forma de las murallas con torreones de Babilonia. Para oponerse a las acusaciones de "mera" feminidad que se le imputaban, se había deificado a sí misma como la madre del dios Damu (ya que sólo un dios puede engendrar un dios), e instalada como "La Reina del Cielo".

 

Sin embargo, a pesar de su inteligencia, también sembró las semillas de su propia destrucción. Mientras criaba a su hijo, lo imbuyó de divinidad a los ojos de los sacerdotes y la gente como el medio de retener el control como la madre divina sin parecer engrandecerse. A medida que Damu crecía, se acostumbró a que cada capricho fuera instantáneamente gratificado por una población servil, de hecho humillante. Por el bien de la seguridad, tenía un grupo de guardaespaldas / acompañante personal del que nunca estuvo, y que formaba un cuerpo de élite de soldados leales y responsables solo ante él. Al llegar a la madurez y exigirle a su madre que fuera instalado como rey, no solo lo rechazó, sino que, al verlo ahora como un desafío a su gobierno, lo programó para la misma muerte que le había impuesto a su padre. Damu se dio cuenta de su plan y se adelantó a su "suposición" matando a su madre con su propia espada y reprimiendo cualquier protesta sacerdotal purgando la jerarquía de todos los que no jurarían lealtad a él. Así, Semiramis murió después de reinar como reina de Babilonia durante 102 años.

 

Estos eventos sentaron las bases para todos los sistemas religiosos paganos de la antigüedad, así como para muchos que viven hoy. Semiramis, en particular, fue el modelo y el original de cada diosa y figura de culto femenino en los mundos antiguo y moderno (ya sea directamente o por derivación); y por ello es fundamental conocer su historia para discernir qué es leyenda fáctica y qué es mero mito.

 

SHALOM A TODOS

ATENTAMENTE RICARDO ANDRES PARRA RUBI

MALKIYEL BEN ABRAHAM

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